Siendo el Senado Romano una de las instituciones que perduró en todas las etapas de esta maravillosa civilización, sin duda alguna, en base a la experiencia y la sabiduría de sus integrantes, se configuró como el organismo que canalizó las aspiraciones y los temores de todo el pueblo itálico.
Qué era el Senado Romano.
El Senado Romano fue una asamblea con una acción permanente dentro del sistema político de la Antigua Roma, sin embargo, tanto su importancia como sus funciones variaron conforme a cada época histórica.
En base a ello, se puede decir que el Senado Romano era una institución reconocida y respetada por todos, asimismo, sus integrantes eran hombres de gran importancia, con sabiduría y experiencia gubernamental o administrativa, razón por la cual, sus decisiones y consejos siempre eran tomados muy en cuenta.
Así, el también llamado senatus o consejo de ancianos, constituyó una institución política con funciones consultivas, pero sin poder vinculante, fundada durante la monarquía con la intención de repartir el poder entre los ciudadanos, además, compuesto por los jefes de las familias patricias más poderosas de la sociedad, cuyos cargos eran vitalicios.
Las diferentes etapas del Senado Romano.
Con el paso del tiempo, el Senado Romano sufrió diversos cambios en cada una de las etapas políticas de la Antigua Roma, tales como:
MONARQUÍA (753-509 A.C.).
Durante esta etapa, el Senado Romano era el órgano asesor del rey, es decir, podía aconsejarlo en relación a sus actos pero no imponerle sus opiniones, no obstante, en los casos de declararle la guerra a una nación extranjera, era necesaria su autorización.
Por otra parte, una vez muerto el monarca, podían ocupar el poder hasta que asumiera el sucesor o se eligiera al nuevo Rey mediante las Asambleas Curiadas o electorales.
REPÚBLICA (509-27 A.C.).
Para esta etapa, el Senado de la cultura romana, no solo mantuvo sus atribuciones anteriores, sino que se afianzó definitivamente como un organismo consultivo, de esta forma, se les otorgó el derecho tanto de convocar, como de presidir.
A su vez, en el año 312 A.C., surgió la Ley Ovinia, la cual le concedió algunas facultades y condiciones específicas al Senado Romano, además, incluía la participación de los plebeyos como miembros agregados. Con ello, los senadores legislaron por encima de las Asambleas Tribunadas o tribales, alcanzando un gran poder.
Como resultado, el senado comenzó a intervenir en decisiones políticas de alto rango, como relaciones internacionales, guerra, hacienda, culto, dirección del ejército, designación de los gobernadores de las provincias y la distribución de las funciones entre los magistrados.
IMPERIO (27 A.C. – 476 D.C.).
Presentando el Senado Romano una reducción de sus poderes, en el momento que las legiones pasaron al control directo del emperador.
A lo largo del Imperio, las relaciones entre ambos fueron antagónicas, en este sentido, monarcas como Tiberio, Calígula, Domiciano, Adriano y Cómodo, promovieron la persecución de los senadores, entrando la institución en franca decadencia.
Cuál fue la importancia del Senado Romano.
Indiscutiblemente, el periodo de mayor auge del Senado Romano se llevó a cabo durante la República, en donde sus atribuciones fueron muy amplias, representando una parte importante, dentro de un sistema casi democrático, con el poder asentado en los magistrados, los senadores y el pueblo, adicionalmente, dotado de cierto tono aristocrático, en base al poder político y económico de sus miembros.
Conforme a ello, esta institución instauró en la sociedad romana la concientización de los derechos y deberes ciudadanos a través de leyes, y un mando político organizado con el nombramiento de funcionarios públicos mediante votaciones.
Todo lo expuesto anteriormente certifica, que el Senado Romano es el principal artífice del sistema político empleado por muchos países en la actualidad.
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