En una civilización bajo el mando de emperadores ambiciosos, pero visionarios, la ingeniería romana jugó un papel determinante en la expansión territorial, sobre todo, en la eternidad del Imperio, tanto, que la huella quedó marcada e imborrable hasta nuestros días.
Algunos aspectos de la ingeniería romana.
La ingeniería romana se caracterizó por tomar elementos de la cultura griega y etrusca, para así obtener un propio estilo híbrido, el cual llegó a ser la codicia de muchos pueblos.
Así, perfeccionando las técnicas, se convirtieron en los mejores ingenieros de la antigüedad, destacándose principalmente en el diseño y la construcción de obras civiles como acueductos y edificios públicos, entre tantos.
Igualmente, la ingeniería romana le dio especial énfasis a la construcción de carreteras, debido a que ello era básico en la expansión territorial, además, una obra bien construida garantizaba su conservación en el tiempo, simbolizando el poderío del Imperio.
Por otra parte, desarrollaron la ingeniería militar construyendo fuertes, campamentos o puentes, y la ingeniería mecánica al desplegar la fabricación de instrumentos o maquinarias necesarias para la construcción, la guerra, moler granos o para drenar espacios inundados.
Cuáles fueron las grandes obras de la ingeniería romana.
Una de las majestuosas obras de la ingeniería romana fue el Coliseo, el cual se convirtió en el lugar de mayor concentración pública, con una capacidad para unos 65 mil espectadores, durante 500 años.
Otro de los grandes triunfos de la ingeniería romana fue la construcción de la Vía Apia, siendo la primera carretera importante en Europa, la cual unía a Roma con Brindisi, el puerto más importante del Mediterráneo.
Además, con la edificación de acueductos, que fundamentalmente seguían el mismo diseño de viaductos con arcos y canales abovedados, los romanos lograron levantar con extraordinaria precisión el Acueducto de Nimes o el Acueducto de Segovia. Asimismo, y aprovecharon la energía hidráulica para construir molinos o para la extracción minera.
Tampoco se pueden dejar de nombrar los espectaculares puentes de la cultura romana, los cuales eran fabricados en piedras y en arcos como estructura básica, tal como el Puente de Alcántara que cruza el río Tajo en España. Igualmente, los embalses con dimensiones extraordinarias como el de Emesa en Siria o el de Proserpina en España.
Sin dejar a un lado, otras obras de la ingeniería civil de Roma como las termas, los foros, los teatros, los circos, las domus, las villas, los templos y basílicas, entre tantos otros testimonios de sus construcciones.
Aportes de la ingeniería romana.
Si bien, los romanos no cultivaron las ciencias, su sentido práctico y utilitario los llevó a lograr grandes avances en la tecnología, en este sentido, sus construcciones colosales, sus extensas calzadas, acueductos y puentes, conforman un testimonio palpable de sus amplios conocimientos técnicos en diferentes áreas de la ingeniería.
Aunque, indudablemente el mayor aporte de la ingeniería romana fue la construcción de carreteras, igualmente, las técnicas usadas para el levantamiento de grandes obras, como el encofrado o los arcos, y el uso de materiales como el hormigón, también fueron importantes.
Uno de los éxitos de la ingeniería romana, fue la aplicación de los conocimientos hidráulicos, para resolver el abastecimiento de agua de las ciudades, implementando una red de acueductos, así como también, solucionaron el saneamiento de las mismas, mediante un sistema de red de cloacas, muchas de las cuales se siguen usando actualmente.
Adicionalmente a lo anterior, hay que agregar el sistema de tuberías de plomo usado para surtir de agua caliente a las termas, o las innumerables fuentes que adornaban las ciudades.
Cabe destacar, que entre las invenciones de la ingeniería romana, se encuentra una maquinaria militar llamada ingenium o ingeniator, la cual siendo usada atacar murallas, posteriormente dio origen a la palabra ingeniero.
Indudablemente, la ingeniería romana ha sido admirada a lo largo de la historia de la humanidad, no obstante, algunos de sus aportes no fueron más que las mejoras de otros inventos más antiguos.
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