Elaborados artesanalmente con ingredientes naturales orientales, los postres japoneses resaltan tanto por su delicioso sabor como por su bella presentación, así, constituyen el habitual acompañante del famoso ritual del té.
Cómo son los postres japoneses.
Conocidos como wagashi, y existiendo muchos estilos, colores o sabores que varían de acuerdo a la época del año y las festividades en donde son consumidos, lo importante de los postres japoneses, es la forma como se elaboran, inclusive hay escuelas especiales que se dedican a su laboriosa producción manual, siendo éste el aspecto más valorado por la sociedad nipona.
De esta manera, frecuentemente el wagashi se prepara con una masa de arroz glutinoso, en una ceremonia llamada mochitsuki, donde se muele el arroz para convertirlo en pasta y luego moldearlo.
Contrariamente, los dulces provenientes de la región de Okinawa y los de origen europeo o chino, no se consideran tradicionales por no usar ingredientes japoneses, como el kasutera y los senbei.
Tipos de postres japoneses.
Categorizados dentro de la alta pastelería, se distinguen los siguientes postres japoneses:
Mochi: es el famoso wagashi japonés que se rellena con anko o pasta de frijoles azukis dulce, y a veces, con una fresa fresca. Siendo consumido durante todo el año por la cultura japonesa, es llamado en primavera botamochi, en verano yofune, en otoño ohagi y en invierno hokuso.
Daifuku: consiste en un pequeño mochi con diferentes tipos de rellenos, recubierto de una capa fina de almidón de maíz para evitar que se peguen a los dedos.
Sakuramochi: elaborado con pasta de arroz con rosas dulces, se rellena con anko y se cubre con una hoja de sakura o de cerezo japonés.
Sufure Chizu Keki: es un suflé de suave consistencia parecida al cheesecake americano pero más agradable al paladar, con un ligero sabor a limón.
Manjū: un dulce hecho de harina, polvo de arroz y alforfón o trigo sarraceno, relleno de anko y existiendo variantes como el koshian, el tsubuan y el tsubushian.
Imagawayaki: siendo muy común en los festivales, es una pastelito relleno con pasta dulce de anko, que recibe un nombre diferente de acuerdo a cada región y época del año.
Taiyaki: se caracteriza por ser una derivación del imagawayaki pero con forma de pez, también puede ser relleno de crema pastelera o chocolate.
Al fin, se puede aseverar que los auténticos postres japoneses son el reflejo de la delicada perfección que caracteriza a la gastronomía nipona, en base a la maestría de sus creaciones.
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