Supeditada a las condiciones climáticas de la región, la economía wayúu permanece en constante movilidad dentro de su propio territorio, debido a que sus tierras no ofrecen muchas posibilidades de subsistencia.
Cuáles son los aspectos de la economía wayúu.
En una región con sequías muy prolongadas, se hace frecuente el desplazamiento de los guajiros en gran parte de la península, buscando los entornos más propicios para desarrollar sus actividades productivas.
Conforme a ello, la economía wayúu básicamente es itinerante, de esta manera, la siembra se realiza en algunas zonas dependiendo de las temporadas de lluvia; por esta razón, esencialmente se dedican al pastoreo del ganado, a la explotación de la sal marina, a la pesca, a la artesanía, y en los últimos años al comercio informal o al contrabando de extracción en la frontera colombo-venezolana.
Las principales actividades de la economía wayúu.
Fundamentalmente, la ganadería constituye la principal actividad de la economía wayúu, además, es un motivo de prestigio social, que a pesar de comercializarse, también se usa a manera de intercambio, para sellar una alianza matrimonial, como herencia, para compensar daños o delitos, e incluso, para solucionar conflictos.
Por otra parte, la cultura wayúu se dedica a elaborar una gran cantidad de productos tejidos de vistosos colores, teñidos con tintes naturales, aunque últimamente industriales, como hamacas, mantas guajiras, mochilas, entre otros.
Adicionalmente, otras de las actividades productivas son la explotación de la sal marina, las minas de carbón y el talco, como también, la fabricación de utensilios domésticos de cerámica, y en menor escala, la pesca y la agricultura.
Cómo funciona el contrabando en la economía wayúu.
Prácticamente, como una manera de supervivencia, esta etnia no oculta su actividad comercial con algunas mercancías que son consideradas como contrabando, entre las fronteras de Venezuela y Colombia.
Así, en la Península de la Guajira, el manejo del tráfico de combustible está en manos de grupos mafiosos, llamados cooperativas, los cuales cuentan con socios wayúu del lado venezolano, quienes viven del almacenamiento o la distribución minorista, y del lado colombiano, la compran para venderla en pimpinas.
Igualmente, el combustible es pasado por la frontera a través de los llamados caminos verdes o por camiones fletados, que sobornan a los funcionarios oficiales de las alcabalas.
Actualmente, más de un millón de galones de gasolina pasan de Venezuela a Colombia, siendo un negocio que ya no pertenece exclusivamente a la economía wayúu, quienes terminaron por ser las víctimas de su propio comercio ilegal, generado con el pretexto de la libre circulación por toda su región y la falta de elementos para subsistir.
Contenidos