Aunque se originaron en China, fueron los árabes quienes introdujeron en la península ibérica, lo que hoy conocemos como la baraja española, cuyo uso se ha extendido alrededor del mundo como una forma de entretenimiento, no obstante, algunos la usan para sus métodos de adivinación.
Particularidades de la baraja española.
La baraja española se distingue por sus diseños inspirados en la época medieval, de esta manera, se divide en cuatro grupos que corresponden a las jerarquías existentes en ese tiempo, en este sentido, los comerciantes representan al oro, el clero simboliza a las copas, la nobleza alude a las espadas y los bastos equivalen a los siervos.
Teniendo un total de 48 cartas, cada clase o palo contiene 12 naipes, enumerados del 1 al 9, donde la primera carta es llamada as, y las tres restantes contienen una figura de cuerpo entero, que representa a los números 10, 11 y 12, es decir, la sota, el caballo y el rey, respectivamente.
Por otra parte, existe una versión de 40 naipes, con los mismos tipos de palos, pero enumerados del 1 al 7, adicionalmente, incluye tres cartas con la imagen del caballo, la reina y el rey por cada grupo, simbolizando los números 10, 11 y 12, correspondientemente. Aparte, generalmente cada mazo contiene dos comodines, que pueden adquirir cualquier valor.
Cabe destacar que las cartas de la cultura española, se diferencian de la de otros países, por el uso de pintas que indican a que grupo o palo se refiere cada naipe, de esta forma, se ubican tanto en la esquina superior como en la inferior.
Cuáles son los estilos de la baraja española.
Entre los diferentes diseños que existen de baraja española, sobresalen los siguientes patrones:
Castellano: siendo el estilo más popular, habitualmente posee 48 naipes más comodines, caracterizándose por presentar un formato de 95 x 73 milímetros y el símbolo del oro representado por una moneda.
Cádiz: es el más antiguo y sencillo de los estilos de naipes de España, con 48 cartas de 95 x 62 milímetros que poseen colores para simplificar su interpretación.
Catalán: con diseños muy particulares, se representa al oro como un sol, asimismo, los 48 naipes y comodines que conforman este mazo tienen una medida de 95 x 61 milímetros.
Concluyendo, se puede decir que la baraja española adquirió su propio desarrollo dentro de esta cultura, transcendiendo a los actuales juegos de mesa, tales como truco, tute, brisca, canasta, mus, burro, escobar, conquián, entre muchos otros.
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